ESTUVE EN UNA ORGÍA CRUISING EN EL CAMPO
Buena
madrugada la pasada, me he levantado hoy muy tarde, con el nabo dolorido pues,
anoche tuvo mucho "trabajo" y del bueno, del que no imaginas y te los
encuentras sin esperarlo, tengo 29 años, soltero vivo solo, todo el mundo
piensa de mí, que soy heterosexual, pero en realidad soy bisexual, me gusta
tanto follarme a mujeres como a hombres, pues soy activo y de personalidad
dominante en el sexo, físicamente, soy delgado fibrado, no me depilo, excepto
los huevos y las ingle, tengo pelo en el pecho, moreno, de pelo corto, buena
polla 22 centímetros.
Anoche,
estaba con unos amigos y amigas, pero la verdad, aunque no sé, si me hubiera
comido algo con alguna de ellas, o en el botellón que estábamos, lo que tenía
era unas enormes ganas de buscar a un desconocido y darle una buena
"montada", así que para ello, me hice el que estaba algo enfermo y me
fui en mi coche del botellón, apenas eran las una de la noche, cuando llegué a
mi zona favorita, unos descampados en las afueras, en el que sobre todo los
fines de semanas suele haber mucho ambiente de "quedada", entre en la
zona de carretera de barro y fui buscando, son pequeñas "islas" de árboles
y arbustos, entre grandes zonas de tierra dura, por donde los coches podemos
circular, paré cuando vi a uno.
Nos
presentamos, al final ambos éramos solo activos y buscábamos lo mismo, fui a
marcharme para quedar alerta en otro lugar y no molestar ni ser molestado,
cuando el tipo, de unos 40 años, alto, fuerte, me propuso me quedara allí, a
ver si los dos "teníamos suerte” y nos lo montábamos con uno o dos pasivos
que vinieran, me excitó la idea, nunca había follado en grupo, solo una vez
hice un trio con dos pasivos y me gustó mucho, pero no había vuelto a repetir.
El
tipo me habló de él mientras vigilábamos las entradas y ver si se acercaban
coches, era casado, solía venir algún sábado que podía, sobre todo tarde, me
explicó, que cuanto más tarde venían "mejores zorras", pues cuando
salían de las discotecas o botellones, venían calientes y se dejaban hacer todo
lo que a él les daba la gana, yo las veces que había ido, no había estado hasta
esas horas, es más ese día ya era tarde para mí.
Entraban
algunos coches o salían, pero sin aparcar junto a nuestros coches por el
momento, pero eso pronto cambió, llegó una furgoneta pequeña, de ella bajo un cuarentón,
como mi compañero, nos miraba pero quedó apoyado en el furgón por ahora,
nosotros junto a los árboles, pero al poco se fue acercando otro coche, hasta
parar junto al mío, aunque yo estaba alejado, quedó allí sin salir, pero el del
furgón decidió venir hacia los árboles, empezó a andar y se paró a unos metros
de nosotros, pero ya metido como nosotros en los árboles, al poco escuché la
puerta de un coche, salió un chico más bien bajo y también se internó por donde
estábamos nosotros, al final quedamos los cuatro, ellos separados unos metros
yo y mi colega, juntos, mirándolos, el cuarentón pasó junto a nosotros pero,
sin decir nada, el chico quieto junto a unos arbustos solo observaba, el
cuarentón se volvió y volvió a pasar junto a nosotros, pero esta vez mi colega
le habló.
- ¿Tienes
un cigarrillo?
- Si
Se
lo ofreció, lo cogió, le dio fuego y tras encenderlo mi colega le dio una
calada y le dijo.
-
¿Qué te va?
-
Soy pasivo - dijo este
Mi
colega, a un metro de mí y yo había oído toda la conversación, vi cómo le cogía
la mano y se la ponía en su entrepierna, este comenzó a molerla en el fino
pantalón de mi colega, pero pronto, lo puso de rodillas y mi colega le hizo
comerle la polla ante nosotros, escuché los ruidos que producía su boca al
comerse la polla, pero pronto su mano buscó mi bulto, lo dejé hacerlo, sin
soltar de su boca la polla de mi colega.
Consiguió
sacar mi polla, fue a por ella, tanto mi colega como yo, estábamos bien dotados
de polla, miré al chico, este se había acercado sin darnos cuenta, ahora estaba
a unos tres metros de mí, el cuarentón volvió a la polla de mi colega, el
chico, se acercó más, lo justo para yo agarrarlo y rápido se ha rodillo, cada
uno empezó a comerse una polla, al poco lo intercambiábamos, pero él colega
puso a los dos a chuparme la polla, se puso detrás y les empezó a quitar los
pantalones a los dos, pronto los dejo desnudos, se puso a darle nalgasos a los
dos, a pasarle su polla por el culo sin metérsela, hasta que se buscó en el
pantalón y se sacó lubricante, los lubricó a los dos, estaban calentísimos, yo
sentía como devoraban mi polla uno, después otro, moviéndose, en los dedos de
mi colega sus culitos, hasta que vi cómo se colocó el condón.
Joder,
se petó al chico, me dijo, le diera la vuela al otro, así me lo dijo ante ellos
y ellos callados, dijo que quería ver como se veían las dos perras folladas, me
saqué el pantalón, cogiendo uno de los condones de mi bolsillo, me lo puse y me
peté al cuarentón, él y el chico se veían las caras, como eran follados por mí
y mi colega, joder, como los había lubricado y dilatado en un "pis Pas"
a los dos y los había comprendido para calentarlos aún más, le daba nalgadas al
chico, este gemía como una perra, yo lo imité, joder teníamos a las dos perras
follando y moviéndose entre gemidos, como "leonas en celo", cuando
creía estar yo en lo máximo, aparecieron dos, primero de mirones, ambos de mi
edad, año arriba, año abajo, apenas un poco después, se corrió el cuarentón,
joder, se corrió como una perra entre gritos diciéndome que le pegara más, lo
hice y se corrió.
El
tío se fue hacia delante, sacándose mi polla, extenuado, yo me levanté, me
saqué el condón, no me había corrido, pues me cuesta aún más correrme con
condón, ya de por si a pelo aguanto mucho, pero es que nada más sacarme el
condón, uno de los mirones fue acercándose a mí.
Empezó
poniendo su mano en mis huevos, lo dejé, lo acarició, pero al poco acariciaba
mi polla, él otro se acercó, mi colega seguía follando al chico, a nuestro
lado, cuando casi sin darme cuenta, tenia a los otros dos comiéndome la polla
de rodillas, el cuarentón cogió su ropa y se fue sin decir nada, lo miré
pensando, ya vas bien servida cabrona, pero decidí quitarme de los dos, pues me
iba a correr pronto de seguir así, solo que ahora estaba lanzadísimo, me puse
junto a mi colega, este seguía montando al chico lentamente y lo tenia que se
derretía de gusto, una y otra vez, le pedí el lubricante, estaba en el suelo
era un tubo, me dirigí a ellos diciéndoles se quitaran los pantalones, los iba
a montar como a perras, eso les dije, ellos rieron pero se desnudaron
rapidísimo.
Ahora
era yo quien lubriqué los dos culos, justo cuando empezó a correrse el chico, una
corrida larguísima, yo me monté al primero, tras colocarme otro condón, al poco
cambié de culo, mi colega tras dejar al chico vino al culo que yo había dejado
libre y se lo empitonó, el chico quedó allí mirando, hasta que se puso a mi
lado viéndome follar, acariciaba con su mano mi pecho, por dentro de mi
camiseta, al poco, para aguantar más dejé de follarlo, me tiré en el suelo y le
hice montarse, dándome la espalda, la guarra cabalgó como una perra en mi polla,
el chico se acomodó, de nuevo a mi lado y siguió acariciando mi pecho, viendo cómo
me follaba al otro, mi colega seguía montando a 4 patas al otro y empezó a
correrse, cuando terminó, el otro se sacó la polla, puso su cabeza junto a las
piernas de mi colega, le sacó el condón y comenzó a chuparle la polla, a la vez
que se masturbaba, el que estaba encima mía se movía y masturbaba a la vez, yo
no dejaba de mirarle el culo como lo movía la guarra, actuando mi polla como un
embolo, casi nos corrimos al mismo tiempo, empecé a correrme yo y aun no había
acabado, empezó a correrse él "mmmmm que gustazo sentir su culo cerrándose
y abriéndose en mi polla, escuchándolo gritar como una zorra.
Nos
fuimos yendo a los coches, los dos se marcharon, quedamos el colega, el chico y
yo, nos lavamos con agua y toallas enjabonadas que nos dio el colega, el chico
no tenía ganas de irse, estaba como le dije "encoñado" del colega, no
había pasado tanto tiempo como creí, estuvimos charlando hasta que el colega
allí junto al coche y junto a mí, puso a "mamar" al chico su polla,
yo ahora solo miraba, el colega empezó a decirle que no lo íbamos a follar tan fácil,
ahora seremos los dos, pero que te vamos a abrir bien, te vamos a meter las dos
pollas a la vez, vas a disfrutar como una perra.
Tras
decirle todo eso, mientras el chico chupaba, lo quitó y se lo llevó de nuevo a
los árboles y yo siguiéndoles, lo colocó a 4 patas, lo lubrico, le dio a su vez
alguna nalgada fuerte, para después tirarse en la tierra, sin pantalones, como
el chico, meterle la polla y empezar a decirme métesela tú también, me quité de
nuevo el pantalón, empecé a meneármela, viendo a los dos, le metí la polla en
la boca al chico, a la vez que el colega lo follaba, hasta que creció bien dura
y me puse tras ellos, el colega lo tenía cogido y metida su polla, puse la mía
junto a la del colega, empecé a apretar, el chico a gritar, el colega le dije
que callara a su puta, me la saqué, volví a lubricarla, volví a intentarlo, el
chico a gritar, pero esta segunda vez, fue entrando el colega estaba quieto,
solo yo me movía, metiendo lentamente y con cuidado mi polla hasta que,
finalmente la metí, el chico estaba dando más que gritos, ronquidos, quieto sin
poderse mover, era como algo, no alguien que usábamos.
Yo
paraba, el colega se movía un poco, cuando él paraba, yo me movía, el chico
quieto totalmente, solo ronqueaba o daba algún grito, era increíble el estado
en que estaba el chico, totalmente pegado a los dos machos, incapaz de poder
hacer nada, eso me calentaba, pero me daba miedo hacerle daño, por lo que nos
movíamos ambos muy cuidadosamente y nunca los dos la vez.
Así
pasamos bastantes minutos, cuando me sorprendí al ver como el chico se corría,
joder, mi polla presionada entre la polla del colega y el culo del chico, hasta
extremos insospechados, me hizo correrme al sentir como el culo del chico se
dilataba y presionaba, el gruñía y gruñía, mi mano se puso ahora sobre su cara,
sentí como su boca estaba echando saliva como un animal, me moví de gusto, el
gruño aún más, llenando mi mano de más y más saliva, hasta que termine de
correrme, nada más hacerlo, le saqué la polla, el chico estaba ahora desplomado
sobre mi colega, este abajo, pero le agarro las nalgas y comenzó a moverse, se
corrió en poco tiempo, pero el chico lo había movido, como quien mueve un fardo.
Cuando
termino, se quitó el chico, quedó sobre la tierra, exhausto, pero el colega se
pus tras él, le hizo separar más las piernas, le abrió las nalgas, joder, el
culo lo tenía todo abierto, dilatado, rojísimo y lleno de flujos de jugos de
todo tipo, el colega sin esfuerzo, metió cuatro dedos de su mano enteros, hasta
parte de la palma de la mano, después lo sacó, cogió el pantalón y me dijo tan
tranquilo nos vemos.
Se
fue dejando allí al chico, aun sin poder recuperarse, le dije se levantará,
pero me dijo que no podía, le ayudé, pero al verlo de pie vi que no mentía,
parecía caerse las piernas, no tenían fuerzas, aunque poco a poco le iban
viniendo, finalmente se marchó dándome las gracias, por haberlo esperado y no
dejarlo allí solo, como el otro.
Era
sobre las tres de la mañana y allí estaba yo en mi coche sentado viendo el
lugar oculto por los árboles y arbustos donde en apenas dos horas me había
follado a 4 "zorras", sobre todo el polvaso que le eche con la
penetración doble al chico.
Era
tarde para estar allí, pensé, y temprano para ir a casa, pero, además, seguía
estando caliente, entre comillas, puse la radio, la escuché pensando que haría,
viendo algunos coches marcharse, alguno entrar, pero ya pocos, arranqué primero,
ya hacia la salida, cuando sin pensarlo volví atrás, volví a aparcar mi coche,
esta vez en otra zona, seguí escuchando la radio.
Las
luces del coche apagadas, allí relajado, tranquilo, pero pensando en lo
ocurrido, había estado bien montárselo con el otro activo, sabía moverse en
este mundo muchísimo mejor que yo, pensé, además, había aprendido algo más,
entre mis pensamientos, llegó en coche aparco junto a mí, al poco salió del
coche, yo seguía dentro a oscuras, a unos 5 metros de su coche, lo observaba,
podría tener 20 - 22 años, lo más imaginé vendría de los botellones, borracho,
como me había dicho el colega, seguí allí, cuando llegó otro coche, este
tendría mi edad, cuando lo vi bajar justo por el otro lado de mi coche, aparco,
venia más decidido, pues apenas paró al bajar del coche se metió entre los árboles,
nada más hacerlo, el que estaba por el otro lado, se fue también tras él, los
perdí tras los arbustos, unos minutos después decidí salir, investigar que
estarían haciendo.
Caminé
despacio, observando todo, hasta que los localicé, estaban escondidos entre
unos arbustos, a su lado había cartones, los dos de pie, sin pantalones, ya
ambos solo con camisas, algo desabrochadas, ambos se acariciaban sus pollitas
pequeñas, eran muy poco dotados, sus culitos se besaban, yo junto a un arbusto,
a unos tres metros de ellos, con una buena luna los veía perfectamente, tras
besarse volvían a tocarse sus pollitas, pero las dos caídas, sabéis que hice,
pensar que haría el colega en esos momentos, pensé que se sacaría la verga e
iría hacia ellos con la verga tiesa, reí entre dientes, pero esa idea que me
pareció graciosa e idiota empezó a tomar cuerpo, en mi cerebro, hasta que lo
decidí y lo hice, dejé todo allí en los arbustos, a tres metros y medio de
ellos, no más y salí ante ellos, desnudo de cintura para abajo y mi polla
aunque no dura, aun si bien desarrollada, moviéndose como un badajo entre mis
piernas, ellos me miraron, me acerqué ya junto a ellos, el más mayor me cogió
la polla, la acarició, el más joven le siguió, los agarré y al poco, los tenia
de rodillas chupándomela, los dos, termine de rodillas entre los cartones, los
dos chupándomela, empecé a trabajar sus culos con mi saliva, pero el más mayor
solo hacia pasearse mi polla por su culo, estaba deseando lo penetrara y
finalmente el mismo la agarró y se la fue metiendo a 4 patas, hasta conseguir
follarlo, me lo follé lento, muy lento, como había visto al colega, él se
derretía por momentos, entre el calentón que tenía y la follada que yo le
estaba dando, apenas me duró, se corrió como una perra, pero nada más correrse,
se cambió sin decir nada, salió como alma que persigue el diablo.
El
chico que había estado allí de rodillas viendo cómo me follaba al otro, busco
su pantalón, saco toallas, me limpio la polla y volvió a mamarla, lo ensalivé
todo lo que pude y se la metí, pero nada más follarlo a 4 patas, un poco me
quité, me tire en los cartones y lo monte en mi polla, encima de mí, al chico
le gustó, verse como una zorra cabalgando encima mía, empezó a besarme, a mover
su culito con maestría, yo le daba algún azote, a él le gustaba, termino
quitándome la camiseta, y después él, desnudos lo follé, lo hice cambiar de
postura encima de mí, si pero dándome la espalda, ahora, se corrió, así quedo
en mi polla, pues no lo deje quitarse, el acepto acaricie su culo con mi polla
metida, pero sin moverme, él recuperándose, después empezó muy lento amover su
culo, era una "buena folladora" pensé, se fue espabilando, lo cambie,
lo puse de lado, me puse tras él, le levante una pierna y seguí follandolo,
después, lo puse a comerse mi polla de nuevo, cuando me aburrí, me puse tras
él, puesto el a 4 patas pero yo de pie agachado, se la metí, le entraba de
arriba, abajo, volví a follarlo lentamente, se derritió, me pidió no parara,
pero al tiempo paré, le dije que quería de nuevo verla cabalgar en mi polla,
quería me ordeñara la polla como una buena hembra, él simplemente me obedeció,
se movió de maravilla, el mejor de todos, como meneaba su culo, hasta hacerme
salir la última gota de leche, pero cuando se vio bien lleno de mi leche, me
pidió que no me quitara siguió moviéndose excitadísimo y meneándose su pollita,
hasta que, se corrió de nuevo encima mía.
Me
dio su número, el único de todos que me lo dio, para quedar cuando quisiera me
dijo él, ahora si me fui a casa, ya si reventado de follar, con el nabo
dolorido, los huevos super vacíos, pero bien satisfecho, como veis toda una
noche-madrugada bien aprovechada.
Relato
enviado por un seguidor - Contacto anónimo.
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